ESKU ONETAN: 10 años cuidando
Hoy, 5 de noviembre es el “Día Internacional de las Personas Cuidadoras”, día en el que se conmemora la labor de todas las personas cuidadoras, tanto familiares como profesionales, de personas mayores, enfermas o que sufran cualquier tipo de discapacidad o dependencia.
Desde Caritas Bizkaia-Área de Mayores y Envejecimiento la celebración es doble, ya que en octubre celebramos también el aniversario de un proyecto relacionado con los cuidados. Se cumplen 10 años (¡qué rápido han pasado!) de la puesta en marcha de ESKU ONETAN, programa de respiro de Caritas Bizkaia.
En los últimos años ha aumentado la conciencia colectiva sobre la situación y las necesidades de las personas cuidadoras, y la importancia de que dispongan de apoyos que faciliten su tarea. Esto hace que se vayan creando diferentes recursos y servicios que den respuesta a algunas de estas necesidades de las personas que optan por atender a un familiar dependiente en su propio domicilio; por ejemplo, un cuidador de 65 años de su familiar de 90 va a necesitar apoyos que pueden tener que ver con la movilidad de la persona dependiente. Estos están más o menos contemplados y parecen evidentes; sin embargo, existen otras necesidades menos “visibles”, cómo la de contacto social, el poder disfrutar de un tiempo personal en la vida diaria… para las que existen menos recursos. El cuidar a un familiar dependiente sin horarios hace que en muchas ocasiones se pierdan las relaciones con las amistades, con el entorno, con tus aficiones… porque la atención absorbe gran parte del día. Estas circunstancias mantenidas en el tiempo dan lugar a que las personas cuidadoras vivan situaciones y emociones difíciles, que pueden tener consecuencias negativas, tanto para ellas mismas como para las personas que atienden.
Desde Caritas Bizkaia, conscientes de esta realidad y a propuesta del Departamento de Acción Social de la Diputación Foral de Bizkaia, hace 10 años se puso en marcha el proyecto de respiro ESKU ONETAN con el objetivo principal de ofrecer apoyo y tiempo personal a los familiares que cuidan a personas dependientes en su propio domicilio. Se trata de un servicio muy flexible y complementario a los recursos de cuidado existentes.
La situación de cada familia es evaluada y acompañada desde su particularidad y necesidades concretas, estableciéndose un plan para cada una de ellas, el cual incluye tanto una propuesta de respiro como una oportunidad de escucha y orientación y de apoyo en el ejercicio de los derechos a lo largo del proceso. Para ello, Esku Onetan se lleva a cabo a través de la acción combinada de dos figuras principalmente, cada una con funciones bien definidas y diferenciadas:
- Personas voluntarias que, a través de un compromiso estable y regular, acompañan a la persona dependiente y/o cuidadora desde una relación de afecto y gratuidad que permite prestarles atención y escuchar ofreciendo una compañía cercana de calidad y calidez, que habitualmente da lugar a la formación de unos vínculos de características especiales y únicas.
- Personas contratadas, pertenecientes a una empresa de cuidados (Zaintzalan-Koopera), que realizan labores de apoyo en las tareas de cuidado físico (como la higiene, la alimentación, la salud, medicaciones, …) y que permiten a las cuidadoras tener un tiempo personal para la realización de actividades cotidianas en otras personas, y que ellas, por sus circunstancias, tienen más difícil llevar a cabo.
Se pone así de relieve la aportación complementaria y necesaria de ambas figuras para procurar un cuidado integral, que responda mejor a las diferentes necesidades de las personas dependientes y sus familias.
ESKU ONETAN, cómo su propio nombre indica, quiere ofrecer a las personas cuidadoras la sensación de que tanto ellas como su familiar están “en buenas manos”, incluso cuando se ausentan para dedicar algún tiempo a sus necesidades personales.
